Golosinas y Chocolates
No se ha encontrado ningún artículo con este criterio
Conectando Compradores con Proveedores de América Latina
La historia de la familia se remonta a principios del siglo XX, cuando Don Pedro Cagnoli llegó desde Lombardía, Italia, y se estableció en Tandil, donde encontró un clima ideal para la elaboración de salames y salamines. Su experiencia y la naturaleza del aire serrano crearon la sinergia que dio origen al inconfundible sabor que hoy caracteriza los productos. Estos salames, poco a poco, trascendieron las fronteras del pueblo y comenzaron a ganar fama en los principales hoteles y restaurantes de Buenos Aires. Don Pedro inició un legado familiar que, tres generaciones después, sigue siendo la base de la empresa: respeto por las tradiciones, respeto por el medio ambiente en el que vivimos y producimos, y amor por la calidad. Hoy, la tercera generación continúa desarrollando la empresa con la misma visión y creencias con las que Don Pedro Cagnoli inició el camino, hace casi un siglo.
No se ha encontrado ningún artículo con este criterio